Juliana revoluciona la manera de crear música al ofrecer una telenovela musical en la que los géneros narran un capítulo de la historia.

Juliana es una cantante y actriz colombiana que ha plasmado su talento en televisión, libros y ahora en ‘La pista’, una telenovela musical llena de giros inesperados.

La ‘Colombiana’ presenta 12 canciones en las que realiza una invitación a disfrutar de la vida a través de la música. Para esto, Juliana explora en la pista con ritmos latinos como: merengue, Reggaeton, Funk Brasilero, Balada, Cumbia, Salsa, Vallenato, Cumbia Texmex, Pop Electrónico y más.  Esto, con el fin de evidenciar la diversidad cultural y musical de su talento.

¿Cuál fue el momento en que dijiste: ‘Voy a hacer algo completamente diferente y revolucionario’?

El momento fue después de una noche de fiesta en la que estuve con Juancho, que es director también de este proyecto. Los dos vimos todas las historias que surgen en la pista de baile y nos dijimos, ¿por qué no hacer una telenovela que en vez de tener capítulos tenga canciones? Una que cuenten cada una de estas situaciones. Es decir; nació desde esas ideas locas que a veces uno tiene, esas en las que se dice: ‘Ah, bueno, esto es solo una idea loca’. Desde esa idea loca que tuvimos y que quisimos desarrollar hoy ya es un álbum completo en el que la música y la vida se entrelazan.

¿Hay alguna canción en este álbum que tenga un significado especial para ti, algo que te haya sacudido el alma mientras la escribías?

Todas las canciones de la pista tienen ese componente muy personal y siento que cada una de ellas me cumplió un sueño. Pero, sin duda, ‘San Fernando’ es la canción más personal de todo el álbum, se la compuse a mi papá, él se llama Fernando, y surgió luego de que pasó por un periodo de salud mental muy delicado.

Esta canción es una de las cosas más especiales que me han pasado en mi carrera porque además tuve el privilegio de invitarlo a ser el protagonista del video. La escribí en un momento de incertidumbre en el que no sabía si mi papá iba a volver a ser la persona que yo recordaba o si iba a recordarme de la forma que me recordaba. Y lo logró al 2000 porciento. Así que yo creo que es como una pequeña lucha y una pequeña batalla muy importante de mi vida que quedó  inmortalizada en mi música.

¿Hubo alguna anécdota inesperada o un momento épico durante la grabación que solo tú y los artistas involucrados conocen?

Seguro sí, pasaron muchas. ‘Aurora’ con piso 21 tuvo un par de versiones diferentes. La canción original la empecé a componer con piano y voz, casi todas las compusimos muy desnudas como guitarra, voz y piano. Yo quería después encontrar el género musical para cada una. Así que una de esas anécdotas es que hubo un par de versiones; incluso, el tema era un poco más afro y tenía otra información que cambiamos. La que hicimos juntos a Las Villa, es muy especial porque se incorporó un párrafo con él que se le dio más vida al tema.

¿Alguna especial con Esteban Rojas?

Esteban Rojas es uno de los seres humanos más espectaculares que yo he conocido gracias a la música. De verdad siempre había admirado mucho su música y cuando le mandé ‘Maldito reggaetón’, él regresó su verso y dije no había nadie diferente con quien yo quisiera hacer esta canción. Cuando lo conocí, pensé que él era más grande, Estebán tiene 22 o 23 años y  me sorprendió tanta profundidad. Ahí es donde uno se da cuenta de que la edad no tiene nada que ver con la cabeza, las vivencias y las almas viejas, y para mí él sin duda alguna es un alma vieja.