Checo Acosta: “Preparo un disco de Alci Acosta, sus grabaciones no recibían regalías”
Checo Acosta se burla de sus haters en ‘El descongelado’, el sencillo que da inicio a ‘Son 30’.
Desde su icónico ‘Mi Pequeña Nataly’ hasta su más reciente hit ‘El descongelado’, Checo Acosta ha puesto a bailar a generaciones enteras con su energía y sabor tropical. Pero, ¿quién es este artista que ha conquistado los corazones de Colombia y Latinoamérica?
Hijo del legendario Alci Acosta y “Doña Ruth”, Checo creció en un ambiente musical único en Soledad, tierra de grandes compositores y cuna de la cumbia soledeña. Rodeado de estrellas como su padre y Joe Arroyo, absorbió la esencia del folclor y el tropical, sentando las bases de su propio estilo inconfundible.
De corista a Rey del Carnaval
Aunque sus inicios lo llevaron por el camino de la balada como Alci Acosta Jr., su pasión por el tropical lo llevó a ser corista de grandes como Adolfo Echeverría, Juan Piña y el mismo Joe Arroyo. Esta experiencia, sumada a la disciplina inculcada por su padre, fue fundamental para construir la carrera que hoy conocemos.
Hablar de tropical es visibilizar la fiesta, la alegría y, por supuesto, el Carnaval de Barranquilla. Una de las tradiciones en las que Checo alcanza su pico más alto cada año. Y, en la que surgen los memes que lo inspiraron a crear ‘El descongelado’.
‘El Descongelado’: La sátira que nació de los memes
¿Quién no ha visto los memes de Checo Acosta “congelado” después del Carnaval, comparándolo con Mariah Carey y la Navidad? Lejos de molestarse, el músico transformó estas bromas en un himno a su vigencia musical. Con una canción festiva y llena de humor que celebra su regreso cada año, como el Ave Fénix de la música tropical, Checo le dice a sus haters ¡aquí estoy! .
Más allá de la sátira que es ‘El descongelado’, Checo Acosta nos presenta ‘Son 30’. El no trata de 30 años de carrera, sino de 30 joyas musicales que han marcado su trayectoria y que siguen haciendo bailar a Colombia.
¿Cómo fue crecer en ese escenario?
Siempre viví rodeado de un pueblo musical, porque soledad es la tierra de Pacho Galán, de la cumbia soledeña y de mi padre Alci Acosta. Ese entorno me sirvió como una fortaleza que me dio las herramientas para llegar a la música. Sin embargo, no lo hubiese logrado sin la disciplina de mi padre (…) Esto me sirvió para tener los pies en la tierra.
¿Qué presentación marcó tu carrera?
Mi segunda presentación fue en Bucaramanga. Para mi sorpresa, en esa ciudad estaba pegado ‘Mi pequeña Nataly’, esa experiencia fue interesante porque debido a su éxito la incluí en mi setlist. A veces recalcaba que era para la gente del interior porque no hacía parte de la idiosincrasia costeña. De hecho, el video es de una presentación que hice años después.
¿Cómo surgió la sátira de ‘El descongelado’?
La idea surge porque me hicieron muchos memes relacionados con el Carnaval de Barranquilla y respondí con música. Es una canción dedica para aquellos que no son mis seguidores desconocen que sigo trabajando el resto del año. Una vez termina el carnaval me enfoco en producir y hacer más shows.
¿En algún momento dudaste de tu carrera musical?
Yo quise ser futbolista, pero estudiaba comunicación y cantaba. Por lo que tuve que dejar de lado una de las tres. Muchos no saben que alcancé a entrenar con el Junior en el 82, era peladito que estaba todo el día haciendo cosas; incluso entrenaba sin almorzar. Sin embargo, la música la manejé mejor. En ocasiones molesto a mis amigos futbolistas porque a los 35 años ellos son considerados viejos; pero, a mis 35, yo empecé a pegar.
¿Cómo ha evolucionado la música folclórica colombiana en los últimos años?
Con la música folclórica me gustaría hacer una campaña porque hace falta más apoyo a lo nuestro. El folclor es tan bonito que los extranjeros lo admiran, y ahora la gente joven ve fácil cantar música popular o un vallenato. A muchos, les interesa pegar y lo ven más fácil en otros géneros que haciendo folclor, pero resulta que la cumbia es la madre de nuestros ritmos, es la que la gente identifica en el mundo entero. Aunque el vallenato se ha posicionado, cuando tú hablas de Colombia la gente lo relaciona con cumbia.
¿Cuál ha sido el impacto en la industria musical?
Mi música se conserva en todas las generaciones. Esto se debe a que desde que inicié en esta carrera he creado letras para que perduren. Esa era mi idea, hacer canciones para el gusto musical no solamente de Colombia sino de Latinoamérica.
¿Cuál es el momento más difícil que has vivido?
Muchos. La muerte de mi hermana mayor en el año 94 y la muerte de mi hermana en la época de la pandemia me marcaron. Uno sabe que los mayores se van a ir, pero no está preparado. A nivel musical, yo tuve un año malo… O sea, sin conciertos, no soné en la radio y andaba loquillo con el trago. Son cosas de las que uno no quisiera hablar, pero sirvieron de experiencia para estar donde estoy.
¿Cuál es la colaboración que te falta hacer?
Soy fan, fan de Juan Luis Guerra y obviamente de Shakira como de Carlos Vives. Soy muy amigos de los dos y nos admiramos mutuamente, aspiro hacer una colaboración con ellos, sé que las agendas son difíciles, pero se vale soñar en grande.
¿Qué otros proyectos estás realizando?
Estoy enfocado en la nueva producción de mi padre, Alci Acosta. Se vienen dos discos con las canciones más famosas de él; esto porque no recibía regalías de sus producciones. Por tal razón, estamos creando con nuevos arreglos sus mayores éxitos.
En definitiva, Checo Acosta es mucho más que un artista de Carnaval. Es un músico que ha sabido mantener viva la esencia del folclor colombiano, fusionándolo con ritmos modernos y creando un sonido único que ha conquistado a públicos de todas las edades.